Antigua práctica hindú para relacionarte con tu pareja
Antigua práctica hindú mientras en muchas culturas el sexo es considerado meramente una actividad recreativa, el sexo tántrico es una antigua práctica espiritual oriental pensada para expandir la conciencia y unir las polaridades de la energía masculina y femenina.Esta antigua práctica hindú se ha estado llevando a cabo desde hace más de 5.000 años, y significa "entrelazar y expandir la energía".
A simple vista parece solo una forma lenta de mantener relaciones sexuales; sin embargo, esta práctica es conocida por generar una poderosa intimidad y una increíble conexión mente-cuerpo entre tú y tu pareja.
A diferencia del sexo muchas veces rápido y casual al que estamos acostumbradas, el sexo tántrico es una experiencia más profunda para lo cual todo lo que necesitas es la información correcta y una mente abierta.
#1 Prepara el espacio
Prepara el dormitorio o el lugar que vayan a utilizar con muchas almohadas cómodas y ropa de cama. Coloca varias velas encendidas (sin perfume) para lograr una iluminación tenue.
Deja vasos con agua o vino ligero al alcance para ti y tu pareja.
Incluso puedes añadir algunos alimentos como frutas o frutos secos, y disponer de un difusor de aceite esencial con un aroma relajante (la lavanda es una buena opción).
#2 Prepárate mental, física y emocionalmente
Para vivir esta experiencia necesitas tener la mente y el corazón abierto.
Si algo te hace sentir incómoda, puedes omitirlo. A lo largo de la práctica, intenta despertar tu curiosidad y sentido del juego para disfrutar de nuevas formas de interacción placentera.
Antes de iniciar, puedes tomar una ducha o un baño, y luego realizar ejercicios de estiramiento y vestirte con prendas cómodas.
También puedes practicar el tantra desnuda si lo prefieres, pero debido a que se trata de una acumulación lenta de energía sexual, a menudo es mejor comenzar vestida.
#3 Comienza el proceso de acumular poco a poco la energía sexual
Después del estiramiento y la ducha, siéntate frente a tu pareja.
También puedes probar la posición Yab-Yum: el hombre se sienta con las piernas cruzadas, mientras que la mujer se sienta de frente sobra las piernas de él.
Luego deben mirarse a los ojos durante mucho tiempo, porque los ojos son las ventanas del alma.
Es probable que se sientan incómodos al principio, pero continúen haciéndolo hasta que se sientan cómodos con la práctica, así se habrá creado una conexión, que es el objetivo.
Ese es el sentido preciso de conexión que se necesita para disfrutar del sexo tántrico.
Mantén el contacto visual durante toda la práctica.
#4 Sigue estos pasos en orden
Respiren juntos, ralentizando la respiración y sincronizando la inhalación y exhalación. Inhalen y exhalen al mismo tiempo mientras se miran a los ojos.
Una vez que estén respirando juntos y totalmente conectados a través de la mirada, dile a tu pareja algunas palabras para conectar más profundamente como cosas que te gustan de él Háganlo por turnos.
Muy ligera y lentamente, mueve tu mano sobre partes del cuerpo de tu pareja para despertar los nervios y aumentar la sensación, manteniendo el contacto visual (sin tocar los genitales ni los pechos).
Si ya no están en la posición Yab-Yum, háganlo ahora. Abrácense y respiren juntos.
Practiquen unos cuantos besos tántricos. Con los labios ligeramente abiertos y tocándose, inhalen y exhalen suavemente juntos. Solo entonces se deben unir sus labios en un beso lento y sensual, suave y dulce.
Dense un masaje tántrico por todo el cuerpo.
Quien recibe el masaje comenzará acostándose boca abajo, mientras quien lo da masajea suavemente las zonas no erógenas durante varios minutos, para luego proceder a las zonas erógenas.
Una vez que hayas masajeado a tu pareja, él deberá realizarte el mismo tipo de masaje.
El paso final de la práctica puede ser tener relaciones sexuales.
Como alternativa, pueden acabar la práctica simplemente acostándose juntos en un estado relajado y feliz.
El sexo no es el foco del sexo tántrico, sino solo una de las posibles opciones.
Si deciden tener relaciones sexuales, procedan lentamente y elijan una posición (o posiciones) que aumente el vínculo y les permita mantener el contacto visual.
Lo más importante: no pierdan la conciencia del acto.
