"Invertir en cultura es invertir en desarrollo", afirmó Nuria Sanz, Representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en México.
Al presentar el Informe en español "Diálogos Post-2015 sobre Cultura y Desarrollo", la también Directora de la UNESCO en el país señaló que para impulsar el desarrollo social y económico inclusivo, así como la sostenibilidad ambiental, se requiere de la cultura como facilitadora y motor del desarrollo sostenible.
El documento elaborado a través de una colaboración entre la UNESCO, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Fondo de Población de la ONU (UNFPA), muestra que el sector de la cultura es también un catalizador del crecimiento económico, crea empleos dignos y mejora la subsistencia.
"Los tiempos no son buenos para la cultura ni en México, ni en cualquier otro lugar del mundo. Entonces hay que echar mano también de la creatividad para conseguir, formular otras formas de finanzas que tienen más el peso del capital cultural, del capital asociativo", explicó.
"En muchos casos lo que hay que aprender es a generar empleos dignos, a que lo informal se convierta en formal, y apoyar no solamente con las finanzas sino también desde la investigación", agregó Sanz.
Además consideró que hay que generar una forma de consumo que sepa valorar los derechos del artista.
"Hay que invertir mucho y no solamente en mercados. También invertir en capacitación, en juntar educación y cultura, en los pequeños productores. Hay que consolidar la cohesión social y el trabajo de las mujeres", expuso.
El informe está organizado en seis dimensiones: el abatimiento de la pobreza, el acceso a la educación, la consecución e importancia de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, la contribución de la cultura en la planificación urbana, la vinculación inherente entre cultura y conservación de la biodiversidad, y el rol que ocupa la cultura en los proceso de resolución de conflictos y en el establecimiento de la paz.
"Con finanzas, con financiamiento y con más peso no se salva todo. Creo que hay enormes fortalezas interinstitucionales que pueden servir para contar mejor, para ayudar en finanzas con fuerza pública y es evidente también que se necesita más investigación aplicada, no sólo de la mano de los economistas", indicó Nuria Sanz.
El documento destaca que para la implementación de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible, la cultura tendrá una posición cada vez más importante en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
"Ello significa una oportunidad para reflexionar en torno al papel que, desde México, desempeñarán el patrimonio y las expresiones culturales y su diversidad en la implementación de esta Agenda", menciona.