El Asalto a la Razón
El jueves reciente publicó MILENIO la Versión no tergiversada del inexplicable senador José María Martínez Martínez, quien días antes dijo al “conductor” Carlos Puig, (En 15 de MTV) que los matrimonios gay son “una moda” pero no constituyen una “familia”.
“Mi posición es tan actual y moderna como la vida misma”, escribió, y se definió así: “No soy homofóbico, misógino, retrógrada o mocho (…), solo un pecador estándar”.
Las uniones que abomina le parecen “una afortunada conquista”, pero no acepta su legalización como matrimonio, institución en que “la naturaleza misma se encarga de que dos personas se amen, tengan hijos; que los hijos y padres se amen entre sí y trasciendan…”.
Ignora, se escribió aquí, que para Jesús (Marcos, Mateo y Lucas dixit), la familia no eran su madre y sus hermanos, sino quienes le seguían.
No lo explicita, pero parece querer decir que una familia sin hijos no es familia.
¿Y los hijos no consanguíneos?
Pues agárrese, moderno senador: los matrimonios de un mismo sexo pueden, al menos en el DF, adoptar hijos…