Horizonte ciudadano. Por: Rosa Esther Beltrán.
Sablazo al tripartidismo
La elección del 7 de junio tiene diversos ángulos por demás interesantes que la hacen diferente a las elecciones intermedias federales tradicionales, uno muy destacado es que, siendo una elección concurrente en varias entidades.
El voto ciudadano optó por la alternancia, tanto en Monterrey, como en Guadalajara y el Distrito Federal, entidades con las listas nominales más numerosas, donde la ciudadanía sufragó por el cambio, lo cual denota un avance en el voto razonado de unos electores con mayor conciencia crítica.
El PRI perdió en 8 de las 15 capitales en las que hubo comicios, sobresale el caso de Morelia, que fue ganada por un independiente, y Cuernavaca donde triunfó el futbolista Cuauhtémoc Blanco.
Está, además ,La Paz; también en Querétaro el PRI perdió la gubernatura ante el PAN; en Sonora el PAN la pierde ante el PRI; en Guerrero el PRD fue derrotado por el PRI, y en Michoacán el PRI entregará ese cargo al PRD.
Uno de los triunfos más sonados hasta a nivel internacional fue el de “El Bronco”, Jaime Rodríguez Calderón, candidato independiente a la gubernatura de Nuevo León (aunque fue priísta por tres décadas) quien ganó por casi un millón de sufragios para derrotar al bipartidismo histórico del PRI y del PAN; resultó el candidato más votado de los últimos tiempos en esa entidad.
La gubernatura de Colima fue ganada por el PRI por una diferencia mínima de 506 sufragios ante la inconformidad del PAN, y a pesar del conteo voto por voto en los 10 municipios de ese estado.
Habrá que esperar el resultado definitivo de esta disputa en la que el candidato del PAN, Jorge Luis Preciado denunció que hay fraude en la elección, de nuevo parece que ante la impugnación la ruta será la del Tribunal Electoral.
De manera que, en lo general, el tripartidismo PRI, PAN, PRD, que imperó de 1991 al 2015 fue el derrotado en esta justa electoral de diversificación de la correlación de fuerzas político electorales. Esa es una buena noticia.
Además de que, por ahora, los candidatos independientes que compitieron fueron figuras ligadas a militancias partidistas; con todos los riesgos que implica, hay que admitir que al menos en esta elección ellos oxigenaron el tenso ambiente de repudio a la partidocracia, y es muy probable que esa figura tendrá que ser legalmente replanteada, además tampoco hubo la violencia que se temía.
La partidocracia derivó en un monopolio del poder político y negocios multimillonarios pero el voto de castigo se presentó por fin y demostró que sirve. Los mexicanos no podemos seguir financiando con miles de millones de pesos a la partidocracia, mientras la pobreza crece sin pausa y, tanto la educación como la seguridad social, van en retroceso.
Lo que también se percibe en esta elección es la avidez de la sociedad por encontrar nuevas formas de hacer política y disposición a participar por parte de los ciudadanos ya que, en general, la votación fue más alta que en otras elecciones intermedias, alcanzando el 47.005%, mientras que la de 2009 llegó al 44.06% y la de 2003 fue de 41.68 %.
Por lo pronto, la proyección hacia el 2018, ya comenzó. El PAN abrió sus cartas con Margarita Zavala y la dirigencia del partido Movimiento Ciudadano propone la unidad con Morena.
Los ciudadanos de San Buenaventura fueron desalojados de la Presidencia Municipal por las fuerzas de Seguridad Pública y las del Estado, Rubén Moreira y el Alcalde delincuente acusado de malversación de fondos, nepotismo, maltrato a la población y robo, echaron mano de la represión, en lugar de recurrir a la conciliación y al diálogo. Ya se ha dicho: en Coahuila estamos en un contexto de dictadura; acosar y golpear al más débil es su estrategia. La complicidad se refuerza.
Sablazo al tripartidismo