CIUDAD DE MÉXICO, 16 de julio (Al Momento Noticias).- A raíz de la Reforma Energética en México se busca extender la extracción de hidrocarburos de lutitas a través del método conocido como fractura hidráulica o fracking. Esta técnica ha sido prohibida en Francia y Bulgaria y en diversos estados, provincias y municipios de otros países hay prohibiciones o moratorias por los grandes riesgos que representa para el ambiente y la salud humana, alertó la Alianza Mexicana contra el Fracking y el equipo de Avaaz Indican que la fractura hidráulica requiere de 9 a 29 millones de litros de agua por pozo que son mezclados con arena y químicos, muchos de ellos tóxicos, que pone en riesgo de contaminación las fuentes de agua de poblaciones cercanas y la habitabilidad de sus viviendas, contamina el aire, tierras de cultivo y pastura, y requiere una ocupación territorial intensiva.
Además, agregan, las sustancias utilizadas afectan directamente piel, ojos, sistema respiratorio y gastrointestinal, pueden afectar al sistema nervioso, inmunológico, endócrino, cardiovascular y riñones y, finalmente, también pueden provocar cáncer y mutaciones. “El fracking es un proceso que incrementa el cambio climático, contamina el agua, enferma a las personas y puede provocar sismos.
Más allá de perpetuar nuestra dependencia en los hidrocarburos, México debe invertir en alternativas renovables de generación de energía. Países como Alemania han demostrado que una transición hacia estas fuentes es viable y asequible, sólo se requiere voluntad política”.
Señalan que los graves impactos ambientales y sociales del fracking se traducen en violaciones al derecho humano al agua y al saneamiento, al derecho a la salud y al medio ambiente sano, al derecho a la alimentación y vivienda adecuadas, entre otros; violaciones que impiden la vida digna de generaciones presentes y futuras. Finalmente, la Alianza Mexicana contra el Fracking y el equipo de Avaaz, señalaron que por todas estas razones, México requiere prohibir la fractura hidráulica.