Fallece en hospital Santo Tomás Manuel Noriega
Estados Unidos. -Murió el exdictador panameño Manuel Antonio Noriega, quien fue un importante aliado de Estados Unidos, despachó matones para atacar a sus rivales políticos y trabajó para el cartel de Medellín.
Su deceso fue este lunes en un hospital Santo Tomás de la capital, a los 83 años de edad, durante la madrugada el martes, además resguardaron el lugar una veintena de policías.
El presidente Juan Carlos Varela confirmó el deceso, aunque no informó sobre la causa. Un amigo de la familia, que habló a condición de no ser identificado, dijo a The Associated Press que Noriega fue desconectado del aparato que lo ayudaba a respirar.
“Muerte de Manuel A. Noriega cierra un capítulo de nuestra historia; sus hijas y sus familiares merecen un sepelio en paz”, señaló el mandatario panameño en su cuenta de Twitter.
Se desconoce cuál será el destino de los restos del ex hombre fuerte de Panamá, quien estaba en condición crítica desde que sufrió una hemorragia tras una operación para extirparle un tumor benigno en la cabeza el pasado 7 de marzo.
“Su fallecimiento termina una época que debemos recordar para no repetirla en Panamá y que fue muy dolorosa por la invasión y que dejó muchos muertos”, señaló Aurelio Barría, quien lideró la “Cruzada Civilista”, un movimiento opositor que protestó en la calle contra el régimen.
Las calles de la ciudad de Panamá estaban en calma, sin manifestaciones a favor o en contra del exdirigente.
Noriega, a quien apodaban “Cara de Piña” por las marcas que tenía en el rostro, pasó los últimos años de su vida en la cárcel El Renacer, una prisión en pleno bosque tropical cerca del Canal, donde purgaba varias condenas por homicidio. Se preparaba para enfrentar a la justicia por otros casos de desaparecidos políticos.
Para sus seguidores fue un líder nacionalista que desafió a Washington, pero sus opositores lo consideraban un dictador que sumió a Panamá en una profunda crisis político-económica y le abrió las puertas al narcotráfico.
Muchos panameños huyeron del país por el temor que infundía el exgeneral que fue derrocado en la invasión de Estados Unidos del 20 de diciembre de 1989. Su caída marcó el fin del control militar que se inició en 1968 con su mentor, el general Omar Torrijos.
En septiembre de 2007, Noriega terminó de cumplir una condena de 17 años de prisión en Estados Unidos por permitir que un barco colombiano llevara toneladas de cocaína al país a través de Panamá. Sin embargo, aún tenía deudas con la justicia francesa y fue enviado a París en 2010 para encarar cargos por lavado de dinero.
Una corte parisina lo sentenció a siete años de prisión por este delito y la fiscalía francesa sostuvo que los millones de dólares que transitaron a través de las cuentas bancarias de Noriega en el país en los años ochenta fueron comisiones que le pagó el cartel de Medellín.
En diciembre de 2011, Noriega regresó a Panamá en un vuelo desde París para rendir cuentas ante su pueblo después de pasar más de 20 años en prisiones de otras naciones por crímenes de guerra, narcotráfico y lavado de dinero.
En Panamá, Noriega fue condenado en ausencia por los asesinatos del dirigente opositor Hugo Spadafora en 1985 y del líder de una rebelión militar, el mayor Moisés Giroldi, en 1989, así como de al menos otros nueve militares que participaron en esa sublevación en un episodio conocido como la Masacre de Albrook.
El mandato de Noriega y su relación con Washington empezaron a tambalearse después del asesinato de Spadafora y de que aumentaran las evidencias sobre sus lazos con el cartel de Medellín. El comienzo del fin llegó en febrero de 1988, cuando jurados investigadores de Florida lo acusaron de narcotráfico.
Mucho antes que eso sucediera, sin embargo, Noriega era conocido como “el hombre de la CIA en Panamá “. Según documentos judiciales, durante años recibió millones de dólares por ayudar a Estados Unidos en América Latina. Entre otras cosas, se desempeñó como mediador de Washington con Fidel Castro, ayudó a confiscar cargamentos de droga en el mar, rastreó el lavado de dinero a través de bancos panameños y reportó sobre actividades guerrilleras y terroristas.