Diario de un Nihilista. Por: Alfredo García.
El sueldo del Presidente
El sueldo del Presidente. Indexar al sueldo del Presidente de la República todos los salarios del País es una evidente falacia. Su alto cargo es en gran medida honorífico, de manera que su retribución es meramente simbólica.
A nosotros, los periodistas, nos gusta la bulla y el pleito: pero ya es hora de echar por tierra ese argumento malicioso de que en México cualquier presidente municipal, gerente de fábrica, estrella de televisión, astro del futbol gana dos, tres o cuatro veces más que el Primer Mandatario. Qué bueno que así lo sea: sería pernicioso que la tabla de salarios sufriera parálisis por respetar un estipendio ceremonial.
Según documentos filtrados en las redes sociales, la conductora de radio Carmen Aristegui ganaba un millón y medio de pesos mensuales: una retribución diez veces mayor que el sueldo de Peña Nieto, pero no superior a los ingresos que la Primera Dama pudo percibir hace tiempo, cuando laboraba en Televisa.
Aunque actualmente no percibe salario alguno en la estructura gubernamental, ¿cuánto pudieron aportarle los gajes de su oficio en la pantalla chica? Se dirá que Aristegui tenía rating y que eso justificaba su ingreso mensual.
Pues bien, “La Gaviota” también lo tuvo, y no sólo por causa de esa bendita telenovela. Ganando dos millones de pesos mensuales, pudo comprar su mansión de 70 millones después de tres años de trabajo.
Los anunciantes de Televisa pagan tarifas superiores que quienes concurren a las estaciones de radio de Univisión, lo cual debe reflejarse en los ingresos de sus figuras estelares.
Y eso que no estamos en Estados Unidos, donde los actores de la televisión y el cine viven como jeques árabes. Aunque Televisa paga jugosas exclusividades a sus artistas, no deja de ser una avara y miserable empresa tercemundista.
Ahora bien, Aristegui, pobre de ella, nunca ha podido construir un emporio como el de Ophra Winfrey, aunque ese debe ser más secreto sueño, a juzgar por como le ha llorado a esa chamba de Univisión.
Los ingresos del finado Julio Scherer también fueron más que pingües, y sin necesidad de extorsionar directamente a los políticos del PRI (de los de izquierda sólo recibía regalos): los extorsionaba indirectamente.
Otro sí, cualquier miembro de la Selección Nacional de futbol puede construirse una mansión del mismo valor después de unos cuantos años de trabajo.
Como sabemos, Vicente Fox ganó menos dinero como Presidente de la República de lo que usufructuaba como gerente general de la Coca Cola en México.
Isidro López debe usar su sueldo como alcalde de Saltillo para comprar chuchulucos: las regalías que percibe por no quebrar las empresas paternas, por mantenerse alejado de ellas, son cien veces mayores al sueldo que, otra vez, devengaba la esposa de Peña Nieto en Televisa.
En el país de Carlos Slim, todas estas elucubraciones salariales son argumentos chatarra. Son gigantomaquias que ocurren en las nubes, muy por encima del mexicano común, a quien sólo le preocupa cómo hacer valer mejor su voto, si cambiándolo por una despensa o un tinaco, o por un montón de promesas oligofrénicas provenientes de políticos que aspiran, ellos sí, a ganar el sueldo del Presidente, y si es posible un poco más.
Alfredo García
El sueldo del Presidente
No hay comentarios.:
Publicar un comentario