La detención del guarda del tren de la tragedia fue la última imagen que entregó el juicio por el accidente de Once, que, tras la audiencia del martes, fue suspendido durante dos semanas por pedido de los abogados de uno de los imputados, que se encuentra internado en terapia intensiva y no puede asistir a las audiencias para escuchar a los testigos propuestos por su propia defensa.
Al no poder reorganizar la lista de testigos citados en las audiencias posteriores, los jueces del Tribunal Oral Federal N° 2 se vieron obligados a postergar el proceso, que continuará el lunes 7 de julio con el mismo orden, siempre que no exista otra solicitud de la defensa del ex gerente de operaciones de Trenes de Buenos Aires (TBA), Sergio Darío Tempone.
El imputado, según confiaron a LA NACION fuentes cercanas a su defensa, contrajo una enfermedad que manifestó sus primeros síntomas a principio de junio. Por esa razón, Tempone se realizó varios estudios que derivaron en la internación en terapia intensiva, donde está siendo sometido a un tratamiento más específico. “No se trata de una maniobra dilatoria; es lo que le está sucediendo”, dijeron.
Los abogados de Tempone no pueden tener contacto con él debido al tratamiento que afronta. Y no quieren dar los siguientes pasos en el juicio hasta contar con su aprobación, más aún cuando les toque interrogar a sus propios testigos, los cuales consideran clave para fortalecer su defensa.
Luego de la interrupción que dictaron los jueces Jorge Gorini, Jorge Tassara y Rodrigo Giménez Uriburu se presentarán rescatistas que participaron en las tareas para socorrer a las víctimas en la mañana del 22 de febrero de 2012. Es probable que también lo hagan otros médicos que estuvieron desde los primeros minutos en los vagones del tren chapa 1, que se estrelló contra el andén en la estación de Once.
En la audiencia del martes, la número 24 y en el tercer mes del proceso, declaró el titular del SAME, el doctor Alberto Crescenti, y otros profesionales de la salud. El descarnado y crudo testimonio de Crescenti, que recordó las escenas de horror vividas durante el rescate de los cuerpos dentro de los vagones, shockeó a varios familiares de las víctimas que, en algunos casos, decidieron abandonar la sala al escuchar el relato.
También declaró la médica legista de la Policía Federal, María Elda Paz, quien fue la encargada de revisar los cadáveres. “Los bomberos ponían los cuerpos en el segundo vagón, en bolsas. Nosotros revisábamos si tenían lesiones externas y les sacábamos fotos”, contó. Y continuó: “Después le poníamos un número a la bolsa y una cinta con el mismo número en la muñeca. Los policías iban tomando sus pertenencias y sus datos: nombre, edad, las lesiones que tenía, la ropa que llevaba, porque había gente sin DNI, que después fue reconocida por la ropa”.
El juicio está atravesando la etapa más extensa, ya que se preveía de antemano la declaración de unos 300 testigos. Mientras tanto, los imputados, entre ellos, el maquinista Marcos Córdoba y los ex secretarios de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, aguardan junto a sus defensores el largo proceso que podría durar hasta 12 meses.
Excarcelan al guarda detenido
Miguel Ángel Gerónimo, el guarda del Sarmiento detenido el martes al declarar como testigo, fue excarcelado tras la decisión del juez de instrucción Ernesto Botto, quien consideró que no existe riesgo de fuga. Gerónimo viajaba en el tren de la tragedia y está acusado de falso testimonio, delito con penas de hasta cuatro años.
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