Heredero de Samsung será interrogado como sospechoso en el caso de la “Rasputina surcoreana”.
Fiscales especiales llamaron a declarar al vicepresidente de Samsung Electronics, Jay Y. Lee, para interrogarlo en calidad de sospechoso en una investigación sobre sobornos; lo que profundiza un escándalo de tráfico de influencias que ya llevó al juicio político de la presidenta de Corea del Sur.
El responsable de facto de Samsung fue citado a comparecer a las 9:30 del jueves en Seúl; dijo en un informe el portavoz de la fiscalía especial Lee Kyu-chul. Si bien se esperaba que Lee, de 48 años; fuera convocado para ser interrogado, el hecho de que se lo identificara como sospechoso causó sorpresa.
Corea del Sur ha estado sumida por meses en un escándalo presidencial. Millones de personas salieron a las calles para exigir la destitución de la presidenta Park Geun-hye. Las autoridades están investigando si Samsung y otros grupos empresariales del modelo chaebol (modelo empresarial basado en grandes conglomerados con presencia en distintos sectores económicos) realizaron pagos a entidades controladas por Choi Soon-sil, confidente de Park, a cambio de favores políticos. La creciente atención que concita Lee podría poner en peligro su facultad para suceder a su padre al mando de Samsung.