Luego de que personal de la Procuraduría General de la República realizó un operativo en el albergue “La gran familia”, que derivó en la captura de Rosa Verduzco, Mamá Rosa y el rescate de 600 personas, entre ellas casi 458 niños y 178 adultos; autoridades del DIF de Michoacán en coordinación con otras entidades de salud, iniciaron la identificación de paternidad.
Verduzco fue detenida ayer martes, junto con otros ocho empleados, por el delito de privación ilegal de la libertad y los que resulten, por lo que fueron interrogados en la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO).
En este caso se habla del robo de identidad, pues Mamá Rosa, como se le conoce en esta región, cambiaba los apellidos de los infantes que llegaban, incluso de recién nacidos y les ponía sus apellidos.
Cabe señalar que el lugar está prácticamente sitiado por padres, militares y federales en lo que ha sido un operativo impresionante. Hay ambulancias que desde la mañana están entrando, así como camionetas con alimentos por parte del sistema DIF municipal.
La mujer sufrió un colapso después de que realizara su declaración preparatoria.
Al parecer tuvo una crisis nerviosa, es una mujer de 86 años. También tiene algunas afecciones cardiacas. “Mamá Rosa”, Verduzco como también se le conoce fue trasladada en una ambulancia de la Procuraduría General de la República (PGR) al hospital San José, ubicado en el Centro Histórico de Zamora.
Familiares que se desplazaron este miércoles al albergue apuntaban a la responsabilidad de Verduzco, quien fue detenida junto con otros ocho trabajadores. Está acusada de negar a los padres visitas a sus hijos, de explotación laboral, abusos sexuales y condiciones inhumanas en su albergue.
La madre de uno de los niños rescatados de la casa hogar aseguró este miércoles que sólo le permitían ver a su hijo tres veces al año y que la responsable del lugar le dijo que para dejarlo ir debía pagarle 37 mil pesos.
Verónica Gamina dijo a AP vía telefónica que hace cuatro años ella misma llevó a su hijo de entonces nueve años a la casa hogar conocida como “La Gran Familia”, porque tenía que trabajar y no podía cuidarlo.
La mujer, que permanecía fuera del albergue en espera de información sobre su hijo, dijo que había tratado de llevarse de regreso con ella a su hijo de ahora 13 años pero que la propietaria de la casa hogar, Rosa del Carmen Verduzco, primero le pidió que se lo pidiera por escrito y luego le exigió 37 mil pesos.