Preferimos huir que morir; vecinos de Chacotla, Guerrero.
Chacotla
Los lugareños temen por su vida, la de sus hijos y familiares por parte de los integrantes del crimen organizado que desafían a elementos federales y militares.
Reclaman nulo apoyo por parte de las autoridades policiales. Los sicarios no tienen miedo, nosotros sí; porque demuestran que pueden exterminar a quien les plazca y a la hora que quieran.
Chilpancingo, Guerrero.
Grupo armado responsable de los seis jóvenes levantados y asesinados a balazos el pasado día lunes; vuelve a irrumpir levantando a otras dos personas.
Ayer viernes integrantes de un grupo armado con alrededor de 45 criminales; entraron a la comunidad de Chacotla, municipio de Mochitlán, los asesinos ahora se llevaron al padre y al hijo de esa localidad.
De acuerdo a información de los habitantes del lugar, los levantados son; Esteban y Enedino, quienes son el padre y el hermano de Álvaro Chino Romero, una de las seis víctimas ejecutadas el día miércoles.
Debido a la situación, los pobladores solicitaron la presencia de policías del estado y del Ejército; además pidieron ayuda para salir de ese lugar porque sus vidas corren peligro.
Por otro lado reprocharon que extrañamente los elementos de la Policía Estatal estuvieron en varias patrullas algunas horas la tarde del miércoles, después se retiraron esa misma noche y el resto la mañana del jueves.
Los cadáveres recibieron cristiana sepultura sin presencia de los elementos policiales a pesar de que los familiares denunciaron que seguían recibiendo amenazas vía telefónica.
Jóvenes fallecidos
Los nombres de los jóvenes que fueron levantados y asesinados son los hermanos Gabriel e Ismael González Cabrera, Isaías y Juan Cabrera Peña (también hermanos) y Álvaro Chino Romero y otra persona de Mazatlán.
Asimismo informaron que la noche del jueves llegaron varias patrullas de la Policía Federal y permanecieron en el pueblo alrededor de cuatro horas para posteriormente marcharse. Ya que se retiraron los agentes federales los criminales regresaron para revisar varias casas.
Esa es la razón por la que nos queremos marchar de este lugar porque nuestras vidas y las de nuestros hijos penden de un hilo, estamos al borde de sufrir una masacre de la cual será responsabilidad de las autoridades que hacen caso omiso de nuestro reclamo.
Solo queremos huir a otro lugar, queremos salvar nuestras vidas, ¿es mucho pedir?, ¡pensamos que es nada lo que le pedimos al gobierno!, ¿solo escoltas?, ¡escoltas! por unas cuantas horas para salir de este violento municipio.
Pedimos ayuda a las corporaciones policiacas y al Ejército desde la noche del lunes cuando se llevaron a los jóvenes y a las mujeres, pero solo hubo un silencio de complicidad, ¡hubiesen podido salvar a nuestros hijos!, pero no quisieron, después soltaron en llanto algunas mujeres.