Hossein Nabor Guillén se pelea con todos. Hasta con los de su propio partido el PRD
Hossein Nabor Guillén, alcalde de Tixtla
Epístolas Surianas. De Julio Ayala Carlos
[caption id="attachment_88934" align="alignleft" width="160"] Julio Ayala Carlos[/caption]
(Carta a Don Héctor)
"CUANDO LA PERRA ES BRAVA, hasta a los de casa muerde". La frase corresponde a un dicho popular que bien le queda al presidente municipal de Tixtla, Hossein Nabor Guillén, quien parece que tampoco conoce aquel que dice "perro no come perro". Ambos refranes se explican por sí solos.
En efecto, el alcalde tixteco se pelea con todos. Hasta con los de su propio partido, el PRD, que lo hicieron ganar la presidencia de ese municipio. De no ser por la diputada Erika Alcaraz Sosa, Hossein Nabor difícilmente sería alcalde, pues la corriente a la que pertenece, el aguirrismo ya no tiene peso.
Se entiende, por supuesto, que se pelee con los de enfrente, y hasta que haga el ridículo en su diferendo con el alcalde de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena, con lo de la celda emergente que se construyó en Metlalapa, pero con los de casa, con los de su propio partido, como que no. ¿Cómo es que se pelea con quienes lo hicieron presidente?
Refrán
Por supuesto que Hossein Nabor no entiende el refrán de que "perro no come perro", y en este caso, que no debe pelearse con sus propios compañeros de partido que lo llevaron al poder, y más cuando supone que puede repetir en el cargo que, hay que decirlo, no puede ganar solo.
En consecuencia, aparte de morder a quienes lo hicieron presidente, el alcalde tixtleco pretende desaparecerlos, y qué mejor que con lo que más le sale bien. Haciendo escarnio de ellos, con el fin de quitarlos del camino rumbo a la elección del 2018, toda vez que como muchos otros sueñan con reelegirse en el cargo.
Cierto es que Hossein Nabor puede hacerlo en razón de que la ley lo permite. Sin duda que ése es el motivo por el que desde ahora está en contra de los que supone le pueden hacer peso y quitarle, en primer término, la candidatura de su partido para volver a contender. Tixtla, aunque es un municipio pequeño, tiene un presupuesto millonario, y el presidente municipal ya le agarró sabor a ese hueso que se llama presupuesto.
Hueso jugoso
En fin que Hossein Nabor ya se peleó hasta con los de su propio partido. La perra, como bien dice dicho, cuando es brava hasta a los de casa muerde, y cómo no si el hueso es muy jugoso. Y lo peor es que en su ansia de repetir como alcalde, se le olvidó desde ahora aquel que dice perro no come perro.
Y EN OTRO ASUNTO, HAY QUE reconocer a la Comisión de los Derechos Humanos del estado (Codehum), por el acompañamiento y atención al caso de la Agencia de Noticias Guerrero (ANG), y su propietario, el periodista José Nava Mosso, quien enfrenta una demanda presentada por el magistrado del Tribunal Electoral del Estado (TEE), Emiliano Lozano Cruz, quien se inconformó por el hecho de que fue exhibido meando en la vía pública.
En este sentido, el presidente de la Codehum realiza incluso un acompañamiento personal a favor del periodista, en defensa de la libertad de expresión y del gremio periodístico, a la par de las acciones que lleva a cabo la institución en la defensa de los derechos humanos y el fortalecimiento de la cultura de los derechos humanos, a través de pláticas, conferencias y talleres, destinamos lo mismo a estudiantes, servidores públicos, organizaciones sociales y por supuesto a cuerpos policiacos.
Gremio periodístico
Hay que decir que el gremio periodístico tiene en la Comisión de los Derechos Humanos del estado a un aliado en la defensa de la libertad de expresión y de imprenta, precisamente de gente como el magistrado del TEE que suponen que por el cargo que ostentan y el conocimiento que tienen de la ley, son intocables e impunes. Pero además, la demanda que enfrenta ANG pretende sentar un precedente de quienes están en el poder para que los medios de comunicación se callen ante los excesos que cometen.
Es cierto. La demanda de Lozano Cruz en contra de la Agencia de Noticias Guerrero no es el único intento que se presenta contra miembros del gremio periodístico para que éstos callen los excesos y la violación de la ley que cometen los servidores públicos. Lo grave del asunto es que agentes de la Fiscalía General del Estado y del Tribunal Superior de Justicia se presten al juego.
Por fortuna, ya lo he dicho, la Comisión de los Derechos Humanos del estado es una aliada de los periodistas en la defensa de la libertad de expresión y de imprenta. Bien por Ramón Navarrete Magdaleno, quien entiende la importancia que tienen los medios de comunicación en estos tiempos en que los servidores públicos, como el magistrado del TEE, quisieran que sus meadas en la vía se festejaran. Bien por la Codehum.
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