Comando asesina a tres policías del módulo en Ixtapa
Chilpancingo, Gro. - Comando armado ejecuto a tres policías y otros resultaron heridos en un módulo de la policía municipal en Ixtapa, Costa Grande.
Los hechos ocurrieron a pleno corazón turístico del balneario de esta ciudad en mencionada región de la Costa en la entidad.
Reportes oficiales refieren que la mayoría de los municipales de José Azueta agredidos estaban desarmados porque no han pasado los exámenes de control y confianza. Su labor se limitaba sólo a hacer presencia en la zona hotelera de este destino turístico.
Los informes señalan que cerca de las 15:00 horas un grupo armado, que vestía uniformes similares a los de la policía municipal y se desplazaba en una camioneta, irrumpió en un módulo policíaco ubicado sobre la principal vía turística de Ixtapa.
Momentos, en que sicarios llegan al lugar abrieron fuego contra los uniformados que no tuvieron tiempo para repeler la agresión ante la falta de armamento y los agresores se retiraron impunemente frente a la mirada de decenas de testigos, principalmente turistas, admite el reporte oficial.
Al lugar acuden soldados y policías estatales que se limitaron a resguardar la zona del ataque.
Las víctimas fatales fueron identificadas como el comandante Pablo Hurtado y los oficiales Cesáreo Sánchez y Efraín Guillén. Mientras que los tres policías municipales heridos fueron trasladados a un hospital para su atención.
En contraste, el gobernador Héctor Astudillo Flores se ha enfocado en celebrar la afluencia turística durante el periodo vacacional de Semana Santa y decir que la entidad es segura, ya que los muertos y desaparecidos “no son turistas ni personas famosas”.
Mientras su secretario de Gobierno, Florencio Salazar Adame, quien se ha dedicado a criticar el conflicto político social de Venezuela, justificó la incapacidad de esta administración al responsabilizar a los gobiernos anteriores postulados por el PRD de la violencia que no cesa en la entidad.
Explican que el ataque armado contra los municipales de José Azueta se registra en un contexto de extrema violencia que se vive en la entidad, donde la estrategia de seguridad implementada por el Ejército desde 2014 simplemente ha fracasado.