Hechos vs palabras: elecciones 2017

Hechos vs palabras: elecciones 2017

Panóptico. Por: Luis García Abusaíd.

“Si nos salimos de los hechos, en política, nos perdemos sin retorno”.

François-René de Chateaubriand

El domingo 26 de febrero de 2017 estableció un primer corte de caja que define el peso específico de las estrategias de los partidos políticos y candidatos independientes que contienden por la Gubernatura, 38 alcaldías más regidores y 25 diputados locales (16 por mayoría relativa y 9 plurinominales).

¿Qué hechos y palabras surgen de este recuento?

LOS HECHOS

Ayer, el PRI, ajustado a las reglas del Instituto Electoral de Coahuila (IEC), sacó el máximo provecho a su elección interna para definir a Miguel Riquelme como candidato a Gobernador. En el cual demostró su sólida capacidad de movilización partidista en los 38 municipios del Coahuila.

La militancia priísta votó de 9:00 a 16:00 horas en mil 500 casillas ubicadas en todo el Estado, para sumar de 400 a 500 mil votos, de acuerdo a distintas fuentes.

Riquelme ganó la candidatura con la más alta votación registrada en procesos similares, sin la participación de sus aliados para este 2017: PVEM, Panal, PSD, PCP, PRC y PJ.

Estos socios podrían incrementar con un esfuerzo extra del PRI, de 200 a 250 mil votos para el 4 de junio; de esta manera, el tricolor alcanzaría entre 600 y 750 mil, de una cantidad esperada de un millón 300 mil votantes con un 65 por ciento de participación electoral –inédita históricamente– en Coahuila.

El resto de votos, de 550 a 700 mil, sería distribuido o fragmentado, entre la Coalición “Alianza Ciudadana por Coahuila” que incorpora al PAN, UDC, PPC y PES, además de Morena, PRD, PT y los candidatos independientes –que también buscan la Gubernatura, alcaldías y diputaciones locales.

LAS PALABRAS

La oposición del PRI está abrazada a discursos incendiarios y engolosinados ante su eventual llegada al poder. En su alucinación imaginan que los votos llegarán a sus alforjas de manera mágica, por ser ellos los elegidos para redimir a Coahuila de su perdición.

Pero están equivocados, los hechos de la política real, como la vida misma, no funcionan así.